Julian Santiesteban

A tiro de piedra: Candidatos y gobierno, la disociación

Nadie ofrece tanto como el que no va a cumplir
Francisco de Quevedo

Por Julian Santiesteban

En aras de ganar elecciones, los candidatos prometen –casi siempre- no sólo lo que no están dispuestos ni son capaces de cumplir, sino que incluso aquello que lejos de generar un beneficio real a la ciudadanía o al gobierno del cual emanan pudiera afectar severamente, prueba de ello es la propuesta de algunos candidatos a las diputaciones quintanarroenses de establecer tarifas únicas para el agua potable y la modificación a la ley respectiva en la entidad.

Gerardo Mora Vallejo, actual director de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) de Quintana Roo, no sólo fue claro, sino además enfático, de que proponer el establecimiento de cuotas únicas domésticas desplomará los ya de por sí escasos ingresos de la paraestatal, medida –dijo- por demás errónea, en un contexto en el que el gobierno federal recortó incluso recursos para la construcción de infraestructura diversa. Lo increíble, por cierto, es que quienes están proponiendo dicha medida son los candidatos de la coalición integrada por el Partido Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y Encuentro Social Quintana Roo (PESQR); es decir, los partidos que llevaron al gobierno al actual mandatario, Carlos Joaquín González.

La propuesta parece un contrasentido, como si para ganar los candidatos de dicha coalición no sólo “golpearan” al contrincante, sino al mismo grupo político que les permitió acceder a las candidaturas –y en algunos casos ya a diputaciones, pues hay quienes buscan reelegirse-; luego entonces, o la propuesta es una más que no se cumplirá y resulta un engaño, o los candidatos reconocen que lo hecho hasta ahora –en cuanto a cobros de servicio de agua- es incorrecto y gravoso para la ciudadanía…¿por cuál opta el lector?

Mora Vallejo de manera abierta planteó –en entrevista radiofónica con el escribiente- que la CAPA pudiera colaborar en la modificación de la Ley de Agua Potable y Alcantarillado para ampliar el rango del consumo mínimo establecido, de diez a catorce metros cúbicos mensuales por vivienda, pero eso de ninguna manera representa una modificación a las tarifas establecidas, que es lo que proponen los candidatos en cuestión; más aún, el funcionario puntualizó que, si es eso lo que se desea, la medida pudiera instrumentarse desde ahora, no tendría que mediar un proceso electoral ni esperar a las elecciones para hacerlo efectivo en beneficio de los quintanarroenses. ¡zas!

Establecer tarifas únicas, advierte Mora Vallejo, no sólo desplomará los ingresos de la CAPA, sino además fomentará el uso irracional del vital líquido, pues cuando el ciudadano tiende a tener menos cuidado del agua cuando dispone de ella a costos menores; de ahí en que insistió en que la propuesta es inadecuada, impactará profundamente a la CAPA, pero sobre todo la calidad del servicio y la infraestructura con que se cuenta, por la imposibilidad de darle mantenimiento o construir nueva. ¡recontra zas!

Por cierto, y con respecto a la desaparición de la Dirección de Recuperación de Adeudos y Ejecución Fiscal (DRAEF) de la CAPA; que también proponen algunos candidatos actuales, Mora Vallejo aseveró que debieran ser las instancias recaudatorias estatales las que deberán emitir alguna opinión, pues además dijo que dicha dirección no debiera estar adscrita a la paraestatal, sino a las dependencias ya señaladas. Así de claro, lapidario y concreto.

COMENTARIO MORBOSO

Con lo dicho por Mora Vallejo es claro que los equipos responsables de diseñar la oferta de campaña trabajaron con desconocimiento evidente de la norma y el entorno, pero quien presenta la oferta debe también conocer el impacto de su propuesta, ¿cuándo se ha visto que un diputado apruebe algo sin conocer los alcances siquiera de lo que vota? (evidente sarcasmo)

Luego entonces, los candidatos van en busca del sufragio prometiendo “el oro y el moro”, se supone su tarea la realizan, ¿será error de los que les diseñan la agenda legislativa o de plano no importa derrumbar una paraestatal como la CAPA y a futuro afectar a más de un millón de quintanarroenses, en aras de conseguir algunas diputaciones? De plano las preguntas obligadas, en un entorno de finanzas apretadas  son: ¿alguien desde el poder, está analizando la propuesta de los que, se supone, son candidatos “oficiales”? ¿De verdad hay “coordinadores” de estructura o medios? ¿En realidad existen esos “cuartos de guerra” que estudian día a día lo que se propone y la retroalimentación correspondiente? Así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.