Julian Santiesteban

A tiro de piedra: El desprestigio como antecedente

El secreto de la vida es la honestidad y el juego limpio,
si puedes simular eso, lo has conseguido
Groucho Marx

Por Julian Santiesteban

La asignación de diputaciones de representación proporcional en Quintana Roo se tornó en el tema del momento, pero en realidad el resultado en favor o en contra de algún partido político es irrelevante para la población en general. Incluso pudiera serlo para Morena, partido que controlará el Congreso local con sus aliados a partir de septiembre, pues ya gobierna tres cuartas partes de la población estatal, pero por supuesto que no será intrascendente para los órganos electorales locales, envueltos en el peor de los desprestigios y con la posibilidad abierta de ser eliminados de la esfera nacional.

El mejor escenario para los contrincantes del partido del presidente Andrés Manuel López Obrador es que, al inicio de la XVI Legislatura, tengan nueve diputaciones con las cuales poder negociar algunas comisiones “dignas” y “encarecer” reformas constitucionales, como aquella que pretendería volver a la normativa antigua que impediría que algún cargo de primer nivel estatal sea ocupado por profesionistas de fuera de la entidad. Problemas e intereses habrá muchísimos, como fracciones o mini fracciones existirán, pero existe una lógica simple en el poder, el factor “bandwagon”, es decir, los “pequeños” se unirán siempre al más poderoso, aunque inicialmente se unan entre minorías para “cotizarse.”

El problema entonces es para el Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo) este fin de semana Morena decidió enfilar todas sus baterías en contra de un de por sí cuestionado órgano que no logró motivar a los ciudadanos para salir a sufragar –aunque evidentemente sea problemática compartida entre todos los actores en la contienda- y cuya actividad resultó ser la más ineficiente en todo el país, de las seis entidades que acudieron a las urnas el 02 de junio, logrando apenas un 22 por ciento de participación, y con una iniciativa federal que pretende desaparecer todos los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLEs). El instituto local ha dado motivos suficientes para ser objeto de todos los ataques.

Más aun, con el proyecto circulado entre representantes de partidos, el OPLE quintanarroense pretende –desde la perspectiva de Morena- aplicar una fórmula para asignación de diputaciones plurinominales que le resta una curul a ese partido, lo cual encendió la ira de sus integrantes, ante lo cual los “morenos” han advertido que “no están jugando” y que “o les entregan sus diputaciones o se las entregan”, pero además solicitaron al Ieqroo les informe qué actividades de fomento al voto realizaron y cómo se gastaron el presupuesto respectivo. De cualquier manera, el perdedor resulta ser el órgano electoral, tan cerca de la desaparición y cuyo daño menor será la sustitución de funcionarios, ya sea del Consejo General o de su Junta General, en este último caso, de las áreas de capacitación y comunicación social, aunque eso represente que el “hilo se rompa por lo más delgado.”

Por todo lo anterior es que el escribiente sostiene que, independientemente del resultado, el Ieqroo resulta profundamente dañado, los vientos de renovación o desaparición rondan ya los pasillos de sus instalaciones y, finalmente, la destitución vendrá por ordenanza federal, desde la Sala Xalapa, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), o con la determinación del Poder Legislativo del país, con su desaparición antes de que concluya 2019. Mal y de malas.

COMENTARIO MORBOSO

Por las reacciones generadas en redes sociales y la relación con el tema, le comparto la Reflexión al Vuelo que el escribiente lanzara este domingo, con algunos cambios mínimos…

REFLEXIÓN AL VUELO (juego de suma cero): en la lucha que inició  este domingo Morena en contra de los órganos electorales de Quintana Roo -aunque hasta ahora se mantiene solo a nivel del Ieqroo-, el partido del presidente López Obrador tiene en juego mucho más que un diputado; tiene en juego el control político de la entidad por los próximos años.

Ya gobierna a la mayoría de la población quintanarroense, y con tres o dos diputados de representación proporcional -que es la lucha que se librará ante la Sala Xalapa del TEPJF- de todas formas controlará el legislativo. La diputación que el órgano electoral pretende entregar a Confianza por Quintana Roo sólo pretende dar margen de negociación al régimen local, no el control de ese poder constituyente.

El mejor guerrero, primero gana y luego va a la batalla, dice Sun Tzu en El Arte de la Guerra, y en este entuerto Morena ya ha ganado. De los actuales consejeros, Thalía Hernández Robledo, Juan Manuel Pérez Alpuche y Jorge Armando Poot Pech, culminan periodo en 2021, Mayra San Román Carrillo Medina en 2022. En el primero de estos años habrá renovación de alcaldías y en el segundo se elegirá nuevo gobernador. Y aun así mantuvieron su apuesta de reasignar una diputación a otro partido que no la ganó en las urnas.

La postura que cada cual ha decidido jugar es ya conocida… que comience la batalla… Por cierto, el equipo jurídico morenista ante el Ieqroo vaya que ha sorprendido gratamente, hacía muchos años que no destacaba algún representante partidista… tanto, que hasta los consejeros decidieron retrasar su sesión programada para las diez de la mañana de este domingo, hasta las dos de la tarde… aunque con el mismo anuncio de resultado. el temor no se traslada en equino menor… el miedo no anda en burro pues! Así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.