El sendero de los iluminados

El sendero de los iluminados: La Paciencia, El llamado. 1 de 2

Cuántas veces hemos estado deseando y esperando que ciertas cosas se den, ya sea dinero, una pareja, un mejor trabajo, salud, mayor claridad de qué deberíamos de estar haciendo, una mejor situación, esperando la inspiración, mayor abundancia, aumento de sueldo, una mejor posición, que todo fluya de una manera más armoniosa, que alguien cambie su forma de actuar o tome decisiones más acertadas, que uno cambie la manera de ser que ya no es tan constructiva, que tengamos mayor madurez espiritual, que pudiéramos despertar conscientemente al presente e iluminar nuestra mente-corazón con la sabiduría de la conciencia, tantas cosas que la mente lanza y que el ego desea.

A veces pareciera que nada está sucediendo, que nada está pasando, que nada está destinado a suceder.
¿Cuándo se dará lo que sueño, deseo y anhelo? Inclusive a veces pareciera que a la vida no le importará tanto y que el Universo tiene tiempos diferentes, como si nuestro reloj y nuestro calendario de nuestra vida fueran diferentes a los tiempos y al calendario del Maestro llamado Vida.

Es increíble como la mente-ego funciona, la mente solo existe en el Pasado y en el Futuro, ahí se esconde a la conciencia, se le adentra en el laberinto de los pensamientos, se puede esconder en todo tipo de deseos y anhelos, inclusive justifica lo deseado, porque me va a traer una mejor vida, me va a ayudar a ser mejor persona, mis deseos y las cosas que quiero vivir me van a dar la felicidad que anhelo vivir para mí y para los demás, una pareja me va a brindar acompañamiento y un amor que quiero vivir, más dinero y abundancia me darán mayor libertad y seguridad en mi experiencia a mí y a mi familia, el despertar y la claridad de conciencia me traerá mayor bienestar y propósito a mi vida.

Pudiera dar muchos ejemplos de todas las cosas que la mente lanza y constantemente quiere que se vuelva realidad, la pasamos deseando, pidiendo, decretando, pero cuando damos? Cuando agrademos? Mientras más clara nuestra mente se vuelve podemos ver como el ego se esconde inclusive en nuestros deseos más honorables y nobles, nublando y mostrando falsa humildad y amor.

Y esto se refleja en el orgullo de las personas basándose en la justificación ante sus creencias vanas espirituales o ante el concepto de la gente toxica.

Cuando empiezas el juego interno y empiezas a despertar a la cualidad de observar todo imparcialmente y sin identificación, es cuando empiezas a ver las sutilezas que la mente-ego tiene. Esta publicación no es acerca de los deseos, las cosas que nos inspiran, el seguir el flujo increíble de la emoción hacia la creación y nuestra propia expansión en la cancha de la alegría.

Éste escrito es para darnos cuenta que sutilmente vivimos insatisfechos en diferentes áreas de nuestra vida, que las cosas que queremos a veces pareciera que no sucederán o que tardarán mucho o poco en que sucedan.

Nos podemos dar cuenta que a veces los deseos, los anhelos y la esperanza pudieran ser contra productivos en nuestro camino para nuestra propia evolución ya que en una ego-mente que está tratando de crear una realidad diferente nos toparemos con la frustración, desesperación eh inclusive podemos pasar por el sufrimiento.

Nuestra naturaleza eterna siempre ha estado completa, siempre ha existido llena y vasta, en este instante eterno nuestro interior no anhela ni desea nada, no quiere y tiene esperanzas de nada. La plataforma interna de vivir la vida es el desapego a todo, des identificado con la mente individual y carente.

La mente siempre está deseándolo todo, quiere esto, quiere el otro, porque siente y cree que cuando se le den las cosas que está pidiendo, esta poseyendo y en realidad estas lo poseen, entonces será feliz, se sentirá completa y encontrará lo que tanto ha buscado.

El juego parece nunca terminar, el sufrimiento y el dolor existe cuando uno no está claro de uno mismo, cuando no sabes quién eres y del potencial que existe en una mente que no se va con la corriente de deseos y fantasías.

Aquí entra un juego diferente, te puedes dar cuenta en tu propia experiencia así como yo me he dado cuenta de la mía, que a veces cuando no se da lo que quieres, es porque algo más importante es requerido en este momento para tu experiencia que lo que tú a veces crees que deberías de tener en este instante para sentirte o más pleno, amoroso y feliz.

Por ejemplo: muchos desearíamos tener una pareja, pareciera que ésta no llega, salimos con los amigos o las amigas a restaurantes, fiestas, etc. Con la predisposición de buscar o encontrar a alguien. Y hay muchas personas que no están contentas con esto, porque el tiempo sigue su curso y la pareja ideal o deseada no llega o tú eliges la situación por la que estas pasando y verás que tiene las mismas cualidades.

Pero qué pasa? hay personas que nunca han estado solas por mucho tiempo, ¿cuántos de nosotros nos hemos tomado el tiempo de pasar tiempo a solas para descubrir el ser fascinante que uno mismo es?

¿Cómo tomarías esta situación si supieras que la persona que está destinada a llegar a tu vida está deseando a alguien que se conozca, qué sepa quién es, qué sea maduro internamente para no vivir adicto y necesitado del amor que según alguien más nos da?

Deseamos a alguien con ciertas cualidades, igual la otra persona está esperando a alguien con ciertas cualidades también, ¿cómo uno se pone listo para que tal evento suceda?. Inclusive si no se nos da lo que deseamos o que según merecemos, nos sentimos frustrados, incompetentes, no suficientes, que hay algo mal en nosotros que no vemos y que deberíamos de cambiar.

Continuara…

Por AMEP 1111