No existe duda alguna que el Internet ya tiene varias décadas de su existencia siendo antes para uso exclusivo del ejército, sin embargo, cuando éste fue comercializado para uso de las empresas, comerciantes hasta llegar a lo que hoy lo conocemos; definitivamente fue considerada como una gran herramienta de trabajo e investigación.

Pero de años recientes la evolución del Internet creció tanto y junto con ello la telefonía celular hasta llegar a los famosos “smartphone” o teléfonos inteligentes siendo este una adquisición casi universal llegando no solo a gente con altos ingresos, sino también dominando aquellos sectores de bajos recursos, aprovechando el Internet para servirse de las redes sociales, así como la principal fuente de información en búsqueda y conocimiento.

Antes de su existencia el principal recurso de fuente de información y conocimiento eran lo que se le llamaban bibliotecas públicas, y lo mencionó en tiempo pasado, porque tal parece que estos han quedado enterrados en el olvido para las nuevas generaciones que ni siquiera llegaron a conocer alguna o pisar una de ellas ya que en su lugar lo único que conocen es la “Wikipedia”, y alguna que otras bibliotecas virtuales.

Son contadas aquellas instituciones educativas privadas que cuentan con un pequeño espacio para tener su propia biblioteca física, es decir, con libros y enciclopedias verdaderas, o sea, impresas en papel y tinta. Pero aun así no deja de sorprender cómo aquellos estudiantes que cuentan con esa suerte de tener una biblioteca no virtual, les causa risa y hasta se mofan de tal antigüedad mientras quienes sí llegamos a visitarlas nos puede causar risa el observar que esta juventud no sabe cómo buscar en libros o mucho menos usar una ficha bibliográfica.

Hasta donde tengo conocimiento alguno solamente en la cabecera municipal Saltillo, se revivió el concepto de las bibliotecas públicas en el 2011; de una manera muy novedosa y vanguardista estimulando realmente a la invitación y amor por la lectura.

El concepto de estas bibliotecas modernas, son sus diferentes actividades para difundir la lectura así, como la cultura en general y su gran variedad de libros de consulta aproximadamente por arriba de trece mil tomos.

Un concepto pensado también para aquel sector de la población que indebidamente los dejan al olvido, es decir, las personas con capacidades diferentes, ya que todo éste nuevo concepto de biblioteca pública se encapsula en una sola palabra, “Biblioparque”.

En sus complejas instalaciones del Biblioparque cuenta con un servicio exclusivo para gente con discapacidad visual, con todas sus herramientas de trabajo como son computadoras, scanner e impresoras en el lenguaje que permite a las personas carentes de la vista poder desarrollarse en el ámbito cultural e información.

Este concepto logró vencer la lucha constante entre bibliotecas, librerías y el internet, en donde tal pareciera que la batalla con la lectura escrita se estaba perdiendo, pero al menos en Saltillo existe una gran oportunidad.

Cada vez las nuevas generaciones están siendo más flojos y sienten apatía a la lectura a excepción de aquellas novelas que son llevadas a las pantallas grandes teniendo un rotundo éxito son las casas editoriales y autores quienes llegan a salvarse sobre la modernidad del internet.

En la actualidad muchos estudiantes ven como algo obsoleto los libros y cosa anticuada, que no saben simplemente el cómo buscar o encontrar una información en una enciclopedia pues están acostumbrados a la facilidad y capacidad de recuperar, analizar, utilizar la información encontrada en la web.

En Saltillo algo, es seguro que al menos se le hace frente a la lucha contra el Internet y teléfonos inteligentes para la lectura esté en manos de la juventud, siendo éste un ejemplo para el resto del país a copiar, aunque todavía existe apatía por las autoridades en copiar este modelo a seguir. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org