La diferencia entre una democracia y una dictadura consiste en

que en la democracia puedes votar antes de obedecer las órdenes

Charles Bukowski

El Instituto Electoral de Quintana Roo (Ieqroo) ha sido el órgano más cuestionado en la historia estatal, aun tomando en cuenta los años aquellos en que, desde el gobierno, se organizaban las elecciones con instancias integradas prácticamente a los órganos de la administración pública, pero los consejeros que lo integran se han ganado el descrédito a pulso, violentando sin rubor las normas vigentes y sin que, hasta ahora, nadie intervenga para impedirlo, lo que convierte a los procesos organizados por dicha instancia, en los más cuestionados, aun cuando en ellos triunfó la alternancia.

Y justamente esa es la “bandera pública” con la que navegan los consejeros del Ieqroo, como si a su labor se debiera la alternancia y no a una decisión ciudadana harta de los viejos vicios, esos que, por cierto, afloraron ahora en la definición de las candidaturas a las once alcaldías locales, pues contra todo pronóstico, el Consejo General del Ieqroo confirmó a un candidato que violentó las normas electorales y desechó la solicitud de registro de otro que entregó la documentación completa para contender.

Me explico, el Ieqroo validó la candidatura de Mario Machuca Sánchez cuando este ya había iniciado campaña federal como aspirante suplente al Senado, el argumento es que renunció antes de que se aprobara la candidatura local, pero el artículo 22 de la Ley de Instituciones y Procedimientos Electorales local contempla que, si cuando se solicita el registro de una candidatura local ya estuviera firme la federal, debe cancelarse la segunda; pero los consejeros electorales decidieron “interpretar” la norma como mejor les pareció.

En contraparte, José Luis “Chanito” Toledo Medina entregó doce documentales que comprueban su residencia en Cancún –ciertamente el Ieqroo cuestiona la autenticidad de la carta de residencia-, pero el candidato asegura que sobradamente la documentación acredita la legal aspiración. El rumor público es que, a  diferencia de Machuca Sánchez, Toledo Medina tiene amplias posibilidades de triunfo y al ser Benito Juárez el municipio más importante en Quintana Roo, lo pone en la antesala de aspirar a la gubernatura, lo que a un grupúsculo ya no le gustó y “operaron” con la autoridad electoral el rechazo, que sin embargo será sólo temporal, pues existen antecedentes similares de actores a quienes se les negó la candidatura y la obtuvieron en tribunales, el mismo mandatario actual es el ejemplo más claro de ello.

Ahora bien, “Chanito” Toledo Medina ha aseverado públicamente su cercanía con el gobernador actual, ha recalcado que toda diferencia política del pasado ha quedado zanjada; lo cual deberá acreditarse antes de que concluya la semana al obtener de nuevo la candidatura a pesar de las resistencias. Por cierto, esas resistencias son de un grupo que se supone muy cercano al gobernador ¿no será tiempo de poner orden? ¿cuánto más se permitirá que se degrade el ambiente público en el primer proceso electoral de Joaquín González? Una cosa es dejar fluir y otra muy distinta, enrarecer el ambiente en detrimento incluso de los que están en el poder.

COMENTARIO MORBOSO

El debate presidencial no cambió en nada las perspectivas de triunfo de los candidatos, pero desde la perspectiva del ciudadano no se trata de cambiar tendencias, sino de normar criterios para la definición del voto.

Porque todos se dicen triunfadores del ejercicio, los analistas hablarán de segundos y terceros lugares, de discursos articulados, de dominio de los temas o desconocimiento de los mismos, otros tantos identificarán posturas similares o antagónicas, pero a usted como ciudadano ¿qué impresión le causó? Por último ¿se enteró que hubo debate? Tal vez esa debió ser la pregunta inicial, esté atentos de los otros dos ejercicios, son algo más que divertimento público, es el futuro del país lo que se discute; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.